miércoles, 23 de mayo de 2012

EL RETO DE LEDEZMA

Juan Páez Ávila

Aunque lo más probable es que el Presidente de la República rechace la invitación del Alcalde Metropolitano a un debate sobre los principales problemas del país y en particular de la gran Caracas, no sólo por considerarlo una autoridad sin su rango presidencial para una confrontación política de ese nivel, lo cierto es que el reto proviene del segundo venezolano representante ejecutivo electo por la mayoría de los votantes del Área Metropolitana, y quien ha dado firmes demostraciones de tolerancia política y coraje cívico para enfrentar la confabulación en su contra de todos los Poderes Públicos que controla el Comandante en Jefe.
Si después de invitar a un debate a los intelectuales que participaron en el Foro convocado por CEDICE sobre las libertades económicas y políticas en nuestros países y en el mundo actual, y luego negarse a su realización, no obstante tener las ventajas del dominio del medio televiso que lo ha conectado con sectores populares que responden más lo emotivo que a lo conceptual, que representan los ilustres intelectuales que nos visitaron, enfrentar a Antonio Ledezma le podría resultar más incómodo. El Alcalde Metropolitano actuaría como ¨el vocero de todos los caraqueños, chavistas y no chavistas, porque para eso fui electo por la mayoría del pueblo de esta ciudad¨, según lo expresó a los medios de comunicación en el Primer Encuentro Metropolitano de Líderes Vecinales realizado el domingo pasado, como parte de una lucha permanente e incansable para preservar su autoridad frente a sus electores y el país en general.
Y en concreto al Presidente Chávez le resultaría muy difícil responder al planteamiento del Alcalde Ledezma acerca de las responsabilidades de sus funcionarios frente a la inseguridad de los venezolanos, y por qué no poner en práctica un plan de desarme de la población civil que según voceros autorizadas portan unos 6 millones de armas. Y qué responder ante el estado deplorable de los Hospitales del Área Metropolitana que le fueron arrebatados a la Alcaldía Mayor, argumentando que el poder central lo haría mejor. Y ante el fracaso en la construcción de viviendas para las familias de menores recursos, cuando el déficit alcanza a 2 millones de unidades habitacionales, el Presidente sería indefectiblemente derrotado.

No hay comentarios:

Publicar un comentario